Tu boca

¿Por qué es importante cuidar nuestra boca?

Es muy importante conocer nuestra boca y saber cómo cuidarla adecuadamente. Hoy en día se le da gran importancia a la estética pero es fundamental tener en cuenta que no es la única razón por la que debemos acudir a la consulta.



La boca es una pieza fundamental en nuestra persona. No sólo es nuestra vía de comunicación por excelencia, sino que también es por donde nos alimentamos. La nutrición, funciún vital de los seres vivos, comienza a partir de ella, con la correcta trituración de los alimentos, facilitando asi la digestión y la asimilación de los diferentes nutrientes.comiendo


Constituye además la entrada de microorganismos, algunos de los cuales son beneficiosos y otros patológicos. Mantener una buena higiene y un buen estado de dientes y encías no sólo nos mantendrá protegidos contra las caries y pérdida dental, sino q además proporcionará un mejor funcionamiento de todos los órganos internos.

Placa bacteriana, sarro, bolsas periodontales...

La presencia de placa bacteriana, sarro y bolsas periodontales constituyen un reservorio de bacterias que dañan los tejidos de sostén de los dientes, afectando con la pérdida de encía y de hueso, conocido coloquialmente como PIORREA. Si la enfermedad periodontal no se frena, se torna irreversible con la consecuente pérdida dentaria.


La pérdida de dientes afectará a la persona en diversos aspectos: empeora su estética, hace mella en su autoestima, dificulta el habla y por supuesto complica la masticación.


Además, ocasiona un desequilibrio importante en la relación intermaxilar, afectando así a la posición de los dientes restantes y la relación de la articulación temporomandibular ATM ( es decir, entre la mandíbula y el cráneo).


La afectación de la ATM puede derivar  desde dolor de cabeza u oido a intensos dolores musculares en la zona de cabeza y cuello.


La ATM también puede afectarse en pacientes BRUXISTAS, aquellos que tienen por costumbre apretar o rechinar los dientes, de forma consciente o inconsciente, y en pacientes que presenten malposiciones dentarias. Tras un estudio especifico, se intentará corregir el problema mediante férulas de descarga o tratamientos de ortodoncia.


Ante las pérdidas dentarias, las ausencias pueden corregirse por medio de:

  • Prótesis fija: aquella que solamente puede ser retirada de la boca por el profesional.
  • Prótesis removible: aquella que el paciente debe retirar de su boca para limpiarla.
  • Implantes: que también consiste en una prótesis fija, que no puede ser retirada por el paciente, pero que en lugar de utilizar la raiz natural del diente, es un elemento de titanio que se oseointegra en el hueso maxilar o mandibula.

Protesis

Protesis

Cada paciente es diferente y su caso se estudia de manera individual para elegir cual es el más adecuado en cada caso.

La importancia de la higiene bucodental

Es muy importante que aprendamos desde muy pequeños a cuidar nuestra boca, y es fundamental que los mayores enseñen a los niños cómo hacerlo. Aunque como todos saben cuando somos niños los dientes “son de leche” y serán recambiados por los definitivos en cuanto crezcamos, son piezas muy importantes. Los dientes de leche son necesarios para la masticación, fonación, deglución y algo primordial que no es conocido por todos: son indispensables para mantener el espacio que necesitará el diente definitivo que lo reemplace. Por tanto la presencia de caries, además de doler como si fueran definitivos, produce una disminución del espacio que ocupan, causando que los dientes permanentes no tengan espacio para salir correctamente, ocasionando malposiciones dentarias que deben corregirse mediante ortodoncia u ortopedia.


La ortopedia permite una corrección o guia en el crecimiento de las bases óseas y de las relaciones entre sí. Es decir, que mediante este tipo de aparatologia se puede conseguir corregir un mentón prominente, una mandíbula pequeña, una mordida cruzada, etc.


La ortodoncia, en cambio, se utiliza para hacer una corrección en la posición de cada diente dentro de la arcada, y del conjunto de las arcadas dentarias entre sí.


La ortopedia no puede utilizarse en adultos y prácticamente puede utilizarse hasta antes de la pubertad, ya que ésta se basa en el crecimiento para poder hacer efecto. Por ello es tan importante llevar a nuestros hijos al dentista en edades tempranas, para que si el pequeño tiene necesidad de corrección de malposiciones óseas, puedan corregirse a tiempo. La ortopedia también corrige casos de interposición lingual, deglución atipica, succión labial, alteraciones causadas por hábito de chupete o biberón… Algunas veces la ortopedia debe ser acompañada de un tratamiento con un Logopeda, para corregir algunos hábitos y mantener los resultados obtenidos.

La primera visita al dentista

Muchas veces nos preguntamos a qué edad es bueno para llevar a nuestros hijos al dentista por primera vez.


La verdad es que lo ideal es llevar a nuestros hijos cuando tienen todos los dientes de leche. Es decir, aproximadamente desde los dos años de edad. Esto es principalmente para que el niño conozca el ambiente y el personal y de esa manera sepa que no corre ningún peligro. En la mayoría de los casos, la visita al dentista es sólo una toma de contacto entre el niño y el dentista: se sienta en el sillón, abre la boca un par de veces, sube y baja y se enjuaga. Se le enseña a cepillarse y se le da un premio por su buen comportamiento.


Sin embargo, hay niños que desde muy pequeños necesitan la atención dental, por accidentes, tales como caídas, muy frecuentes en los primeros años de vida, o por el uso inapropiado de chupetes con miel o biberones muy dulces durante la noche. Por ello, es fundamental que se arreglen las ausencias por golpes, o las caries por dulces desde pequeñitos, para evitar asi el dolor, la pérdida de dientes, que entre los niños también es traumático, y la pérdida de espacios, que provocan malposiciones cuando crecen.


Dientes felicesComo padres debemos tomarnos el tiempo necesario en casa para enseñar a nuestros hijos la importancia de una buena higiene bucodental, desde que tienen sus primeros dientes. Esto hará de ellos adultos preocupados por su salud, sin miedos para ir al dentista y responsables para mantener en buen estado las restauraciones y tratamientos.